Los implantes dentales son un tratamiento terapéutico utilizado frecuentemente ante la falta de piezas dentales con el fin de devolver al paciente toda la funcionalidad bucal y una sonrisa completa. El tratamiento en sí mismo es un proceso sencillo que requiere de una correcta planificación y una completa explicación por parte de los dentistas al paciente. Gracias a las prótesis colocadas sobre implantes, es posible recuperar la estética y la función correcta de la boca; sin embargo para garantizar el éxito del tratamiento se deben conocer y superar algunos mitos que no son ciertos.
- No me puedo poner implantes porque no tengo suficiente hueso.
Actualmente se puede preparar correctamente el hueso para la colocación de un implante. Existen injertos óseos provenientes del mismo paciente o de un banco de huesos que se pueden utilizar para que el paciente obtenga el nivel óseo necesario para la colocación de un implante. - Los implantes dentales pueden sufrir alergia o rechazo.
Los implantes está hechos de titanio, un material que tiene una excelente biocompatibilidad con el organismo humano por lo que no sufren alergia ni rechazo. Lo que sí puede ocurrir es que no se consiga la osteointegración necesaria para mantener el implanta en la boca. - Los implantes dentales son solo para personas mayores que han perdido sus dientes.
Los implantes se pueden colocar en cualquier persona qeu haya terminado su periodo de crecimiento óseo. No hay limitaciones de edad. Cualquier momento es bueno siempre que se tengan unos buenos hábitos de higiene y no presenten enfermedad periodontal sin tratar. - Cualquier dentista puede colocar implantes.
La terapéutica de implantes precisa de grandes conocimientos y de una importante pericia. El profesional que lleve a cabo esta intervención no solo ha de estar bien formado en implantes, sino que debe estar bien preparado para llevar a cabo y evaluar el estudio radiológico de la zona a implantar, y tiene que saber realizar un plan de tratamiento adecuado. - La colocación de implantes es un tratamiento largo y doloroso.
La colocación se realiza bajo anestesia local y no es una intervención dolorosa. El postoperatorio sí es un poco molesto y hay que seguir las recomendaciones del cirujano. - Los implantes duran para siempre.
Si no se cuidan, los implantes pueden durar menos de lo previsto. Si el paciente cuida su boca en general, mediante una higiene oral, combinada con visitas periódicas de control y mantenimiento periodontal e implantológico, pueden durar toda la vida. - Los implantes no se tienen que cuidar.
Los implantes hay que cuidarlos como se cuidan los dientes. Un implante dental precisa de una correcta higiene bucodental para evitar enfermedades como la mucositis o periimplantitis. Los implantes, igual que los dientes precisan de controles e higiene profesional periódicos, siendo imprescindible una excelente higiene bucal para mantenerlos sanos y libres de infección.